La boda de Mateo y Melisa se cancela y Rodrigo descubre la relación secreta entre Valeria y su mejor amigo

Valeria acompaña a Carmen al hospital para que se realice un chequeo médico y, por casualidad, ve el informe médico de Melisa. Se queda de piedra al descubrir que, tras su caída, a la joven le realizaron un legrado. La supuesta hija de Alfonso solicita un comprobante médico que lo certifique, pero el personal se niega a entregárselo por cuestiones de confidencialidad.

Inmediatamente, Valeria telefonea a Mateo y le confirma que, tal como indicaba el anónimo que recibió, Melisa ya no está embarazada. Le pide que acuda a la clínica para solicitar un informe que lo acredite.

El hijo de Hilario llega al hospital abatido. Ha perdido a su bebé y estaba muy ilusionado con la idea de ser padre. Valeria intenta consolarlo con palabras de aliento: "Todo pasa por algo", le asegura la supuesta hijastra de Fedra.

Mientras tanto, en la hacienda, todo está listo para la boda civil de Melisa con Mateo. Sin embargo, el joven irrumpe en la ceremonia fuera de sí y exige a Rodrigo que lea el informe médico que confirma que Melisa ya no está embarazada.

Lejos de ocultarlo, la joven acusa a Valeria de lo ocurrido. Afirma que el accidente que sufrió fue provocado por la supuesta hija de Alfonso y la responsabiliza de la pérdida del bebé. Pero Mateo no le cree. Con firmeza, le asegura que no quiere volver a verla nunca más.

Enfurecida y buscando venganza, Melisa revela públicamente ante Rodrigo que Mateo y Valeria son amantes. El joven médico queda en shock al conocer la verdad. Siempre ha estado enamorado de quien cree que es Natalia y no comprende cómo su mejor amigo pudo ocultárselo.

Mateo intenta justificarse, explicándole que conoció a la supuesta Natalia en un avión sin saber que era la hija de Alfonso y que, desde el primer momento, surgió una conexión especial entre ellos. Sin embargo, Rodrigo se siente traicionado y no está dispuesto a perdonarlo. Mateo, destrozado, teme haberlo perdido para siempre.