Soraya envenena a Mariana en silencio: un plan mortal que la debilita día a día y pone su vida en peligro

La empleada del hogar de los Salvatierra, Matilde, se ha convertido en la cómplice de la malvada Soraya. La sirvienta está suministrando en el café de Mariana una gota del brebaje que un Chamán y una bruja prepararon a petición de Soraya, quien planea acabar con la vida de la hija de Pedro Villarreal. Sin embargo, Soraya ha ocultado a Matilde que la pócima es en realidad veneno. La exnovia de Luis Alberto ha mantenido en secreto su plan de envenenar a Mariana para sabotear su boda con el hijo de don Alberto, aunque sí le ha confesado a León Alfaro su deseo de ver a Mariana muerta.

La hija de Rafael Montenegro, también, idea un plan para seguir suministrando el brebaje a Mariana en la oficina, asegurándose de que solo ella tome el veneno. Para lograrlo, finge estar arrepentida por el daño que haya podido acusar a los empleados, a la familia Salvatierra y a la novia de Luis Alberto y les regala a todos una taza personalizada con sus nombres.

Mientras tanto, Mariana cada vez se encuentra más débil y se marea en casa de su íntima amiga, Britny, quien ahora es novia de Santiago, el hijo de Daniela. Teme estar esperando un bebé y se realiza una prueba de embarazo, pero da negativo. Al regresar a la mansión, la joven acaba desmayándose y cayéndose al suelo. Una sirvienta consigue reanimarla, pero su estado sigue empeorando. Preocupados, los Salvatierra recurren al médico de familia para que le haga un chequeo.

El doctor le realiza un análisis de sangre y le hace un electrocardiograma. Aparentemente, todo parece estar bien y únicamente le recomienda que se tome un complejo vitamínico y unas cápsulas para aliviar sus síntomas estomacales. Sin embargo, Mariana continúa bebiendo los cafés con el veneno y, sin saberlo, su vida corre un grave peligro.