Juan Carlos se transforma en Eva María para limpiar su pasado y recuperar el amor de Helena

Juan Carlos ahora es un prófugo de la Justicia, pero todo el mundo piensa que ha muerto, por lo que nadie le busca. Es una gran oportunidad para él de demostrar su inocencia y que ha sido víctima de una trampa. De momento se ha refugiado en la casa de Mimí de la Rose, una estilista que regenta una humilde pensión. Allí se sincera con ella y le cuenta que se enamoró de Helena pero que ella terminó enfadada con él al considerarle responsable de sus desgracia.

Por su parte, Helena ha sido contratada por el Grupo Imperio para desarrollar el proyecto de la playa 'Majahua', el proyecto que Plutarco le robó. Ella es la que mejor lo entiende (es obra suya, claro) y, aunque está muy molesta con ellos y en un principio no quiere ni oír hablar de ellos, termina aceptando el puesto porque necesita el dinero y pagar la deuda del banco.

Grupo Imperio está buscando una secretaria que ayude a Helena y Juan Carlos llama para intentar trabajar allí. Cree que es la mejor manera de recuperar su amor y demostrarla que no tenía nada que ver con lo que le pasó. El problema es que sólo buscan mujeres jóvenes para el puesto.

Mimí le ofrece la posibilidad de hacerse pasar por mujer y conseguir el puesto. Parece una idea descabellada, pero puede ser la mejor opción de Juan Carlos de estar cerca de Helena. A partir de ahora se llamará Eva María.