Azra acepta un difícil caso sobre la custodia de una niña tras conmoverse con su historia

Cehir y su hija Eçe se presentan en el despacho de abogados de Azra con un bote lleno de dinero y una petición desesperada. Utilizan todos sus ahorros, que son muy pocos, para intentar contratar sus servicios y evitar que la madre de la niña se pueda quedar con la custodia de ella.

La historia es muy delicada. Cuando Cehir y su mujer tuvieron a la pequeña, la madre les abandonó a los pocos días de haber dejado el hospital. Desde entonces sólo en contadas ocasiones han podido contactar con ella, pero hace pocos días recibieron una citación judicial de los abogados de la madre para conseguir la custodia de la pequeña. Cehir es pobre y con muy limitados recursos, pero ha cuidado de la pequeña desde el principio y ambos mantienen un estrecho vínculo. Si la madre logra la custodia de la pequeña, la situación de Cehir será desesperada.

Han acudido a ver a Azra para contratarla, aunque sus recursos no dan para pagar la minuta de la abogada. Elmer, el dueño del bufete ha querido advertir a Azra sobre lo delicado del asunto y lo difícil que será ganar el caso. Cehir ha escuchado accidentalmente la conversación y la ha interpretado mal. Sale huyendo del despacho con su hija al sentirse traicionado. Azra logra localizarlo en una cafetería donde trabaja y, después de escuchar con detalle su historia y comprobar lo que piensan de él sus compañeros y su jefe, decide arriesgarse y aceptar el caso.