Meryem y Savas han decidido casarse lejos de la tierra en la que tantos problemas han tenido, y en la que su primer intento de boda resultó fallido. Pero antes de partir, han decidido pasar por casa de Savas para despedirse de la familia y arreglar unos asuntos pendientes, entre los que se encuentra la empresa y la familia. Jasmine vivirá con Yurdal y el resto de la familia en la casa familiar y, además, formará parte de la empresa junto a Savas y su otra hermana. Su padre y su mujer, que esperan un hijo, tendrán que volver a empezar la relación. Lo que nadie sabe, ni Savas, es que Meryem está embarazada y pronto la familia crecerá. Junto a Gülcu y Bürcu, emprenden el viaje para casarse.