Kenan quiere llevar a cabo su particular venganza contra Alpay

La locura que llevó a Alpay a apuñalar a Mithal y a Ikra en la puerta de la boda de Melek y Halil comienza a tener serias consecuencias. En cuanto se ha conocido que él esta detrás de todos estos sucesos, la policía ha comenzado a buscarle por todos los lugares. Alpay se encuentra acorralado.

Pide ayuda a Kenan, su viejo socio y amigo que le ha estado protegiendo todo este tiempo. Pero Kenan hace ya tiempo que se dio cuenta de que Alpay no era un tipo en el que se podía confiar. A Kenan le repugna la actitud de Alpay y, a pesar de ser un hombre oscuro, no tolera lo que Alpay ha hecho. Kenan también ha descubierto que Alpay y Funda pensaban traicionarle de la mano de Idris. De su mano derecha ya se ha ocupado, ahora planea hacerlo de Alpay y su mujer.

Kenan está en el centro de la sospecha, pues todos suponen que está escondiendo a Alpay. Él lo niega, porque lo que pretende es torturarle por todo lo que ha estado haciendo. Alpay se encuentra en el sótano de una casa de Kenan y cree que el que fuera su gran amigo le está protegiendo. Nada más lejos de la realidad. Le tiene atrapado y preso y Kenan se encarga de darle malas noticias del exterior para hacerle los días más complicados. Alpay cada día se hunde un poco más.