Tragedia, secretos inconfesables y amores recuperados. Así ha sido el final de La herencia

La tragedia sobrevuela la hacienda de Santa Catalina. Pedro ha perdido completamente la cabeza y tiene secuestradas a Sara y a Julieta y está dispuesto a acabar con ellas. Su malvado plan ha salido a la luz y las autoridades le persiguen por sus crímenes. Sin embargo Pedro recibe una última sorpresa. Débora aparece con Tadeo en la mano. Ahora Pedro debe elegir entre la vida de su hijo y la de Sara y Julieta. Todo está perdido para él cuando ambas logran escapar del cautiverio donde las tiene secuestradas; Pedro, en el patio de Santa Catalina se topa de frente con sus hermanos. Ya no hay vuelta atrás; las visiones de su madre muerta le atormentan y acaba tomando la peor de las decisiones. Ha disparado a Lucas y se ha marchado corriendo al lugar donde tantos desmanes cometió. Allí, sólo y perdido, toma el mismo veneno que le dio a su madre. Juan ya le encuentra agonizante y ambos se funden en un abrazo que en nada consuela al mayor de los Del Monte.

Tres meses después de los violentos sucesos acaecidos en la hacienda Santa Catalina, la normalidad intenta abrirse paso. Los hermanos Del Monte han retomado el control de la empresa y las cosas comienzan a funcionar de manera correcta. Julieta tiene un gran regalo para Mateo quien se entera de allí del sexo del bebé que espera junto a Julieta. Además, Juan y Sara tienen algo muy importante que compartir con todos.

El gran día de Juan y Sara ha llegado. Todo el mundo en el pueblo se ha reunido en torno a la iglesia para celebrar el enlace entre ambos. Después de tantos problemas y contratiempos, el amor triunfa y los dos se dan el sí quiero en medio de una gran expectación. Nadie se lo ha querido perder y todos se han reunido en el templo para disfrutar de la boda de Juan del Monte y Sara Portillo.

Pero no todos son alegrías en la hacienda Santa Catalina. La enfermedad de Julieta ha seguido su irreversible curso y la mujer de Mateo ha fallecido. Antes tuvo la posibilidad de dar a luz al pequeño mateo, pero poco después nos dejó a todos. Pudo despedirse de los suyos y recibir el cariño todos, pero su marcha ha dejado una gran dolor entre todos, sobre todo en Mateo.

También hemos descubierto algunos secretos que desconocíamos. Nadie imaginaría quién estaba detrás del envenenamiento con vino de Déborah, la madre de Sara. Estuvo a punto de costarle la vida, aunque logró salir. Próspero y Rosa se han reconciliado y ambos han empezado juntos una nueva vida en la que ya no habrá secretos ni mentiras.