Devra alcanza su mayor sueño junto a Melek y su abuela Nujin

Devra está pletórico. Se va a elegir al líder de las familias de la zona y tiene la esperanza de que sea él el elegido. Leyla está contenta por su marido y emocionada de acompañarlo a la ceremonia que se va a celebrar, pero entre los planes del hijo de Behiye no está ir con Leyla sino con Melek, la mujer a la que ama de verdad, y con su abuela Nujin.

La madre de Zehra se viste de gala para la ocasión, despertando los celos de Leyla. Melek ha intentado a toda costa no acudir con Devra a la fiesta para darle la oportunidad a Leyla de acompañarlo, pero el primo de Azad insistió encarecidamente y, al final, se ha visto obligada a hacer acto de presencia.

Leyla se muere de envidia y rabia al ver cómo Devra y Melek se marchan juntos de la mansión, y Behiye aprovecha la ocasión para influir negativamente en la joven asegurándole que Melek solo quiere deshacerse de ella.

Ya en la ceremonia, Devra cumple con su sueño. Ante los clanes de la zona, el hijo de Kadim se convierte en líder de todos ellos. Su misión será resolver los desacuerdos que se produzcan entre clanes de la manera más justa y mantener la unidad de todas las familias.

Devra está dispuesto a cumplir con su cometido y dedica unas palabras de cariño a su abuela Nujin y a su mujer Melek. "Gracias a mi abuela respeto todas las costumbres, y Melek estará a mi lado apoyándome y dando su opinión cuando se produzca alguna discusión entre las familias", asegura firmemente.

En ese momento, llega Ali al festejo popular y asegura a todos los presentes que Devra no es un verdadero Kirman. Pero, nadie le presta atención, ya que el joven está ebrio, y Nujin le pide que guarde la compostura.