¿Una convivencia imposible? Julieta revoluciona la casa de los Carranza con su repentina llegada

Julieta se instala oficialmente en la mansión de los Carranza tras abandonar Alicia el domicilio familiar junto a su hijo Gonzalo y su madre, doña Eva. En la vivienda, solo se han quedado Miranda al tener Sergio la custodia de su hija, y Yuri que no ha querido alejarse de su hermana pequeña.

La joven periodista está muy ilusionada con la idea de vivir en la casa de su amante, pero, al llegar al lugar, ya quiere dejar su sello de identidad y decide retirar, sin contar con la opinión de Sergio y de sus hijas, las fotografías familiares que cuelgan de las paredes de la mansión.

El marido de Alicia pide a su hija Miranda que baje a dar la bienvenida a su pareja y que se muestre agradable con ella. La pequeña, que tiene un fuerte carácter y es rebelde, se opone al principio, pero, al final, no le queda már remidio que ser simpática con la amante de su padre.

Julieta al ver a Miranda intenta ganarse su confianza, sin mucho éxito. "Vamos a ser muy buenas amigas y te voy a llevar al canal de televisión donde trabajo con tu padre para que conozcas a todos los famosos", le asegura emocionada.

Más tarde llega a la mansión Yuri que no puede ocultar su malestar al ver a Julieta en casa y apreciar todos los cambios que ha realizado en la vivienda sin avisar. Sergio la consiente todo y las hijas de Alicia siente animadversión hacia ella.

Julieta quiere hacer más remodelaciones en casa, entre ellas construir una bodega de vino y Sergio está dispuesto a complacerla. La joven periodista desea darle una lavado de cara a la mansión para que pierda la esencia de Alicia y no va a parar hasta conseguirlo. ¿Miranda y Yuri podrán vivir bajo el mismo techo que Julieta?