Eysan es presionada por su padre y no aguanta más. Por ello decide escribir una carta a Ömer confesando quién es realmente. Está completamente enamorada y dolida por la situación.
La reapertura del club de Kivanç se convierte en el escenario perfecto para que Ayça despliegue todas sus armas y no se separe de Bora en toda la noche, con una clara intención: ganarse al empresario.