Zehra rescata a su hermana Elif de la mansión y los Kirman entran en cólera

Zehra está desesperada. No quiere dejar a su hermana pequeña en la mansión de los Kirman. Nujin ha decidido casarla con Ali, pero Zehra no quiere que su hermana pase por el mismo calvario que sufrió ella en sus propias carnes.

El amigo de Zehra, Yusuf, el joven que conoció en Estambul cuando llegó a la ciudad para escapar de los Kirman, tiene una idea para liberar a Elif. El plan es rescatar a la pequeña de madrugada para que no sean sorprendidos.

Una noche, Yusuf y Zehra llegan hasta la mansión y el joven salta el muro de la casa para que su amiga pueda entrar por la puerta. Cuando ya están en el interior de la vivienda, encuentran a la hija de Rashit durmiendo en la misma habitación donde descansaba Zehra. Pero, hay un problema. Fatma, la criada de los Kirman, está con la pequeña, menos mal que es una mujer con un gran corazón y deja que los niños se marchen.

A la mañana siguiente, Melek, asustada al ver que Zehra no ha pasado la noche en su habitación, se acerca hasta la mansión al sospechar que puede estar allí con Elif. Pero, los Kirman no saben nada. Creen que la desaparición de las dos hermanas es una artimañana de la profesora para que las pequeñas puedan estar juntas. Kadim entra en cólera y amenaza a la joven con matarla. Cemal, el padre de Ali, calma a su hermano. Azad y Melek descubren, gracias al profesor Ibrahim, que Yusuf, Zhera y Elif están juntos.

Mientras tanto, Yusuf lleva a Zehra y a Elif a un lugar seguro. Se refugían en la casa de su abuelo. Su primo, al que no ve desde hace mucho tiempo, llega al lugar de casualidad y le cuenta a Yusuf que su padre está en al cárcel y que unos hombres le están buscando para acabar con su vida. Le aconseja que se esconda de ellos. El joven ya lo tiene dedicido. Se refugiarán en Estambul hasta que todo se calme.