Alí la toma con Zehra a la que acusa de haberle delatado a la familia

Alí ha logrado salir por fin del hospital y lo ha hecho de la mano de su mujer Zehra y de su hijo. Sin embargo, lejos de regresar a casa para terminar su convalecencia, ha vuelto al bar para seguir jugando a las cartas con los mismos hombres que le amenazaron en el hospital por no pagar lo que les debía.

Su madre anda preocupada porque no ha regresado a casa y se teme lo peor; así que contacta con su hermano Azad y le pide que lo traiga de vuelta para evitar que siga metiéndose en problemas. Azad, que sigue buscando a Melek, localiza a su hermano Alí y se presenta en la partida que está jugando para sacarle de allí. Ya tiene demasiados problemas y no necesita tener más. Alí asegura que lo hace para intentar devolverle el dinero, pero Azad lo saca por la fuerza del local.

Una vez fuera y después de que Azad le haya pedido que regrese a casa con su mujer, Alí quiere saber quién le ha dicho a su hermano dónde se encontraba. Su primera idea es que Zehra le ha delatado, así que acude a la tienda donde ella le espera junto al bebé y se pone a golpearla por haberle delatado. Azad llega al poco tiempo y le separa. Además le dice que no ha sido ella. Alí ha vuelto a equivocarse.

Mientras Melek ha llegado a la ciudad tras huir del psiquiátrico y se encuentra con la escena de su hija Zehra y Alí. Cuando está a punto de hablar con ella, unos encapuchados la secuestran y se la llevan.