Una rutinaria visita a la doctora Begum termina con la peor de las noticias para Süreyya y Faruk

Süreyya y Faruk acuden al hospital para que Begun les haga una nueva ecografía. El embarazo de Süreyya tiene ciertos riesgos y es el momento de seguir controlando que todo vaya correctamente. Begum se sienta junto a Süreyya para empezar la exploración, pero algo no va bien. Begum se marcha para pedir una segunda opinión y los nervios llegan a Süreyya y Faruk que no entienden lo que está ocurriendo.

Un nuevo doctor llega a la consulta y desgraciadamente confirma las sospechas de Begum. No encuentran el latido del corazón del bebé. Süreyya ha perdido el niño y debe someterse a una operación para sacarlo. La noticia cae como una bomba para Süreyya y Faruk que tenían muchas esperanzas en este bebé.