La policía irrumpe en la tienda de Osman con una orden de registro

Mete sigue perseguido por la policía tras sus últimos actos y por eso han decidido registrar sus propiedades. La entrada de la policía ha revolucionado a los presentes, que ven como los agentes destrozan su zona de trabajo y todo lo que han estado construyendo durante mucho tiempo.

En el altercado, Hakan y Osman acaban heridos y es Cemilé quién le dice a la policía que se vaya.