Yonça tiene una nueva víctima y esta vez está dispuesta a llegar hasta el final

Yonça, la hermana de Gülru, siempre ha tenido un especial gusto por el dinero y por tener una posición social desahogada. En su momento vio en Taner, el sobrino de Ömer, la oportunidad de lograr sus objetivos. Taner, un joven presuntuoso y en guerra continua con su padre, se prestó al juego y ambos iniciaron una fugaz relación amorosa que no terminó bien. Taner se cansó enseguida de Yonça y ella peleó de manera muy ruin por mantenerse a su lado y al menos conseguir algo de dinero de su poderosa familia. No salió bien y Yonça pagó un alto precio por su actitud y comportamiento.

Ahora las cosas han cambiado radicalmente. Su hermana Gülru está casada con Cihan y el dinero ha entrado con fuerza en la familia. La posición social de Yonça es mucho mejor, pero su hermana Gülru la conoce bien y no está dispuesta a darle vía libre en todas sus peticiones, por lo que Yonça busca la posibilidad de tener más dinero en el bolsillo.

Se ha fijado en Şevket Hekimoğlu, el despiadado padre de Taner y el hermano de Ömer. Vive una farsa de matrimonio y está permanentemente enfrentado con su hijo. A pesar de las advertencias de Ömer su comportamiento es violento y desagradable, pero tiene una debilidad y esas son las mujeres. Yonça lo sabe y decide aprovechar su momento. Le prepara una buena encerrona en un restaurante donde un fotógrafo les saca a ambos unas fotos comprometedoras. Es todo lo que Yonça necesita para llevar a cabo su plan. Si Şevketno quiere que esas fotos salgan a la luz, deberá pagar un alto precio por ellas. Yonça está feliz.