Ramsay acude al insalubre Mayfair: "Me sorprende que no hayáis matado a nadie"

Gordon Ramsay visita un restaurante con una ubicación privilegiada en el paseo marítimo de Fuengirola, en la Costa del Sol.

Abierto hace 28 años por la londinense Pat y su esposo de 45 años, Jack, el local está atascado en una cápsula del tiempo de los 70. El Mayfair no ha hecho grandes reformas desde que abrió sus puertas y la gente no entra en el restaurante.

Desesperados porque no disponen de dinero en efectivo, Jack y Pat se han visto obligados a vender su casa en el Reino Unido y todo el dinero que han recaudaron lo han gastado y  no les queda nada para mantener el negocio.

Gordon descubre un restaurante con varios frigoríficos llenos de comida precocinada que amenazan con envenenar a cualquier cliente y hace todo lo que está en su mano para que el negocio vuelva a funcionar.