A pesar de que haya supuesto declarar la guerra a su padre, Ender ha decidido defender a Yaman y que se quede en casa. Sabe bien de sus problemas familiares y le ha dicho que puede quedarse hasta que la casa quede completamente rehabilitada.
Mientras Rifat y Gülcihan están en casa, el patriarca de los Koroglu recibe un paquete que, tras abrirlo, le cambia completamente la cara. Gülcihan se pregunta por qué.